Podemos definir un itinerario formativo como la planificación de la formación y el conjunto de acciones formativas que son necesarias para desarrollar ciertas capacidades.

En todo plan formativo de cualquier organización es necesario diseñar un itinerario formativo, especialmente en formaciones e-learning.

Cada vez son más las empresas que necesitan mejores profesionales preparados para todos los tipos de competencias. Por lo que, se aconseja adquirir varios conocimientos para poder crear una carrera profesional.

¿Qué nos permite hacer un itinerario formativo?

La última finalidad que tienen los itinerarios formativos es conseguir una mejor rutina a la hora de adquirir nuevos conocimientos y competencias y definir los pasos necesarios para adquirir los conocimientos.

Seguir un itinerario formativo te puede ayudar a concretar el qué, cómo, cuándo y dónde adquirir esos nuevos conocimientos. Podemos compararlo como un camino donde certificar esos nuevos objetivos formativos.

Los itinerarios de desarrollo profesional ayudan a definir formaciones anuales que permitan mejorar profesionalmente el proceso de adquirir nuevos conocimientos.

Los itinerarios formativos permiten que los alumnos entiendan la formación como algo continuo y constante, que se consigue a largo plazo. Además, permiten evaluar a los alumnos, en lo que respecta al compromiso y al progreso.

¿Qué hay que planificar en un itinerario formativo?

Para planificar un itinerario formativo debemos de tener en cuenta:

  • A quién quieres dirigirte: debemos de buscar información acerca de las diferentes profesiones, conocimientos y experiencia previa de los posibles alumnos a los que va a dirigirse la formación.
  • Las necesidades existentes en el mercado y en el sector: debemos de hacer un análisis de las ofertas laborales de nuestro entorno, analizar qué buscan, qué demandan.

Además, hay que tener en cuenta que los itinerarios formativos pueden tener diferentes estructuras en función de: el nivel de conocimientos y experiencia de los usuarios, la temática y la duración del mismo.

Y, en función de las necesidad de la empresa, pueden surgir diversos tipos de itinerarios formativos dependiendo de la temática, como: los itinerarios formativos relacionados con los servicios o productos de la compañía, los que se centran en la atención al cliente, para los comerciales o personal de ventas o incluso para los líderes de equipo.

¿Qué tipo de formaciones entran dentro de los itinerarios formativos?

Existen numerosas variedades de ofertas formativas para adquirir nuevos conocimientos y desarrollarse. Podemos dividir las formaciones en tres grandes grupos:

  • Formación reglada
    • Educación Secundaria Obligatoria
    • Bachillerato
    • Formación Profesional de Grado Medio
    • Formación Profesional de Grado Superior
    • Enseñanzas Artísticas
    • Enseñanzas Deportivas
    • Enseñanzas de Idiomas
    • Educación de Personas Adultas
    • Enseñanzas Universitarias de Grado
    • Enseñanzas Universitarias de Postgrado
    • Doctorado
  • Formación no reglada
    • Cursos de reciclaje profesional
    • Máster o Títulos propios de las Universidades y Escuelas de Negocios
    • Seminarios
    • Jornadas
    • Cursos en Línea Gratuitos
  • Formación profesional para el empleo
    • Certificados de profesionalidad
    • Formación Bonificada para Empresas
    • Formación Gratuita para Ocupados y Desempleados
    • Escuelas Taller
    • Casas de Oficio
    • Talleres de Empleo

No podemos excluir ninguna de este tipo de formaciones, ya que todas ellas otorgan una mejora en la empleabilidad y en el crecimiento profesional y personal, que nos puede ayudar a saber hacia dónde dirigirnos y, por supuesto, encontrar algo que nos de pasión y que cumpla con nuestras expectativas profesionales.

Claves para escoger el mejor itinerario formativo

Después de que hemos definido el itinerario formativo, de que hemos visto los tipos de formaciones que existen y que tenemos claro de que queremos seguir formándonos, vamos a explicar unos puntos para definir las formaciones que vamos a recibir en los próximos años:

  1. Definir nuestras fortalezas, debilidades y quién queremos ser. Algo que tenemos claro: debemos de buscar información de calidad. Debemos de hacer una autoevaluación: queremos realizar esa formación para poco a poco convertirnos en esa persona que queremos ser, de forma profesional y personal. Debemos de intentar evitar las presiones externas y valorar desde nuestro punto de vista, estilo de vida, valores…
  2. Valorar la disponibilidad formativa: no siempre encontraremos la formación que deseamos en el momento que queremos o de la forma que queremos estudiarla, por no hablar de que tenemos que ver qué presupuesto queremos gastarnos en esa formación, el tiempo que podemos o queremos dedicarle. No debemos de olvidar, que tenemos que prestar atención a saber si para acceder a esa formación debemos de tener unos conocimientos previos, y, por último, qué objetivos queremos conseguir.
  3. Algo que sí que tenemos que destacar es saber cuáles son las formaciones que más salidas profesionales tienen en el sector al que nos dedicamos. Hay que valorar qué probabilidad de especialización hay en el sector y cuál es la que más nos interesa. Quizás debemos de pensar en cambiar de sector si no estamos muy convencidos.
  4. Crear un balance de formación, ya que no todas las formaciones están bien divididas su plan de estudios: algunas ofertan dualidad, otras prácticas en empresas, otras incluso ofertan una bolsa de empleo al matricularse en la formación. Debemos de saber que aunque un curso sea gratuito, no significa que sea peor que uno que cuesta dinero.
  5. Hacer una revisión de los contenidos y valorar quién imparte esa formación. Ya que a veces esa formación es cara, debemos de mirar con lupa que sea de la mayor calidad posible, ya que además de formación también puedes generar una buena red de contactos, ya que esto es algo clave.
  6. Debemos de crearnos una buena rutina de información, y para ello debemos de buscar y seguir a grandes referentes.
  7. Tenemos que disfrutar del aprendizaje, ya que vamos a vincularlo a la búsqueda de empleo o mejora de nuestra posición en la empresa o en el sector.

El seguir un buen itinerario formativo nos va a permitir adaptarnos a la contratación en el mercado laboral de nuestro sector. Debemos de no tener frustración por aprender rápido, ya que el adquirir nuevas habilidades necesita tiempo, constancia y los beneficios se verán a largo plazo.

Sabemos que aprender es algo muy necesario para nuestra carrera profesional y personal, y es por ello que debemos de definir un buen itinerario formativo, evaluando las diferentes ofertas educativas, sabiendo si lo que queremos estudiar está disponible, y ver los beneficios que nos aporta cada una de ellas y sus características.

Te encuentras en la situación contraria, es decir, eres un centro formativo y quieres aprender cómo diseñar un itinerario formativo, no te pierdas nuestro post: ¿Cómo diseñar el itinerario formativo para e-learning? Y si aún tienes dudas, estaremos encantados de ayudarte, ¡contacta con nosotros!